Главная | Обратная связь | Поможем написать вашу работу!
МегаЛекции

El rey Guntram prueba su santidad




 

Aquellos prí ncipes cató licos en la lucha no retrocedí an ni siquiera ante la destrucció n de las iglesias, como testifica a menudo precisamente el obispo Gregorio. Los duques del rey Childerico, Desiderio y Bladst (este ú ltimo «hasta copulaba con frecuencia» en el atrio de la iglesia de San Hilario de Poitiers), devastaron en 583 el territorio de la ciudad episcopal de Bourges, que supuestamente lanzó al combate a 15. 000 hombres, «en un terrible bañ o de sangre, en el que cayeron por ambos bandos má s de siete mil. Con el resto del ejé rcito los duques penetraron en la ciudad, arrasá ndolo y destrozá ndolo todo y provocando tal devastació n como jamá s se habí a oí do desde tiempos inmemoriales: no se perdonó ni casa ni viñ a ni á rbol alguno, siendo todo incendiado, destruido y aniquilado. Se adueñ aron de los vasos sagrados de las iglesias y pegaron fuego a los mismos templos».

En 585 las tropas de san Guntram atacaron la iglesia de San Vicente de Agen, «rebosante de tesoros de toda í ndole, que pertenecí an a los habitantes de la ciudad, pues habí an esperado que unos cristianos no dañ arí an la iglesia de un má rtir tan grande. Aun así, se habí an cerrado cuidadosamente las puertas. Mas al irrumpir el ejé rcito y no poder abrir las puertas del templo, le pegaron fuego sin tardanza y despué s de haber destrozado las puertas, se apoderaron de todos los tesoros y vasos que allí se encontraban, llevá ndose consigo los utensilios sagrados del templo». Y en la ciudad conquistada de Cominges la misma soldadesca cató lica degolló a los sacerdotes con sus servidores al pie de los altares de las iglesias incendiá ndolas despué s. Incluso en el territorio de Guntram, en las regiones de las cuencas del Saona y del Ró dano, las iglesias fueron saqueadas y los sacerdotes asesinados. 18

Y, como queda dicho, Guntram era un santo. Un santo del que Gregorio escribe en una ocasió n: «hablaba continuamente de Dios y de la edificació n de iglesias», pero que al mismo tiempo cumplió el ú ltimo deseo de su esposa la reina Austrichilde: matar a espada a los mé dicos que no habí an podido curarla. Hallá ndose in extremis, «en las ú ltimas», demandó «con un sollozo profundo a su compañ ero, junto al lecho de muerte», el juramento de que su muerte «no quedarí a impune»; y ese piadoso juramento cristiano «lo cumplió puntualmente el bravo rey Guntram», dice el no menos bravo Daniel-Rops que ve ese crimen escalofriante «sazonado con un cierto humor negro». Segú n

114
 Fredegar, los mé dicos fueron antes sometidos por orden del rey a «diversas torturas» (diversispoenis). San Gutram hizo ejecutar asimismo a los hijos de Magnacar, un noble franco, pasando naturalmente todos sus bienes «al tesoro real»; y todo ello só lo por haber difamado a la reina, que tambié n en el propio Gregorio aparece como una «mujer desvergonzada» y con un «alma desvergonzada». 19

Tras la eliminació n de Gundowaido los nobles rebeldes de Austria y Neustria continuaron la lucha contra Guntram, contra Brunichilde y contra Childeberto, que ya habí a alcanzado la mayorí a de edad y que habí a escogido como residencia principal la ciudad de Metz junto al Mosela, en vez de Reims. Varios intentos por asesinar a Guntram y a la reina fracasaron. Y tras el nacimiento de Teudeberto y Teuderico, hijos de Childeberto, los añ os 586 y 587, los conjurados austrios planearon tambié n la eliminació n de Childeberto y la supresió n de sus retoñ os. Entre los revolucionarios a las ó rdenes del duque Rauching de Champagne se contaba una vez má s el obispo Egidio de Reims. Pero Guntram, que debí a ser depuesto, se olió el asunto, avisó a Childeberto, que los eliminó. Llamó a Rauching e inmediatamente despué s de la audiencia, al abandonar la sala, dos porteros le rompieron las piernas. «Inmediatamente los que ya estaban apostados y dispuestos se lanzaron sobre é l con sus espadas y le machacaron la cabeza de forma que apareció toda la masa encefá lica. » Los tesoros de Rauching, que segú n parece superaban a los del rey, se los apropió é ste. 20

El clan real, Childeberto II, su mujer Faileuba, su madre Brunichilde y su tí o Guntram se encontraron en la frontera de los dos paí ses, en el castillo de Andelot, y el 28 de noviembre de 587 firmaron un pacto de sucesió n recí proca, que reforzaba la solidaridad entre las casas soberanas francoburgunda y austria y regulaba diversas contiendas territoriales así como el problema de la sucesió n: el tí o o nieto superviviente gobernarí a en el reino del otro y lo mismo harí an sus sucesores, 21

El acuerdo de Andelot tuvo sobre todo consecuencias de polí tica interna. Pero Guntram acabó triunfando tambié n en todos los enredos de polí tica exterior, especialmente con los longobardos y los visigodos, con los que estaba implicado desde hací a tiempo.

Así, ya entre 569 y 575 el santo, que sabí a defenderse, habí a rechazado una y otra vez a las tropas longobardas que irrumpí an por los pasos de los Alpes occidentales. Con aquellas correrí as, no especialmente preparadas, contra Provenza y Burgundia meridional arrasaron y pasaron a sangre y fuego cuanto pudieron encontrar a su paso. Repetidas veces fueron casi aniquiladas por obra sobre todo de Eunio Mommolo, generalí simo de Guntram, como ocurrió en medio de los bosques de Em-brun por un ejé rcito franco, en el cual tambié n combatieron los obis-


pos de Embrun y de Gap personalmente y del que «muchos fueron muertos». En otra ocasió n Mummolo, segú n san Gregorio, llevó a cabo una matanza en Provenza acuchillando «a muchos miles, sin que cesase el derramamiento de sangre hasta el anochecer, hasta que la noche puso fin a la mortandad». Tambié n combatieron los francos en el sur, no sin las correspondientes ampliaciones del territorio, anexionando Guntram a su reino la regió n limí trofe del norte de Italia, así como dos obispados de la iglesia franca: el ya existente de Aosta y el de nueva fundació n de Saint-Jean-de-Maurienne. Algo má s tarde seguirí a el obispado de Wallis. 22

 

Поделиться:





Воспользуйтесь поиском по сайту:



©2015 - 2024 megalektsii.ru Все авторские права принадлежат авторам лекционных материалов. Обратная связь с нами...