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Capitulo 7. Carlomagno y sus guerras. 1. La «misiуn» sangrienta de los sajones
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CAPITULO 7
CARLOMAGNO Y SUS GUERRAS
«Tengo al franco por amigo, mas no por vecino. »
proverbio griego'
«De todas las guerras que Carlos hizo la primera fue la aquitбnica... Despuйs de acabada aquella guerra... Carlos se dejу inducir por los ruegos y sъplicas de Adriano, obispo de Roma, y declarу la guerra a los longobardos... Despuйs reemprendiу la guerra contra los sajones... ininterrumpida durante treinta y tres aсos... y con todo el poderнo bйlico de que disponнa irrumpiу en Espaсa... Carlos venciу tambiйn a los bretones... y amenazу a los beneventinos con un ataque, si no querнan sometйrsele... Entonces estallу de repente la guerra bбvara... Tan pronto como fueron aplastadas aquellas sublevaciones, se declarу la guerra a los eslavos..., la guerra mбs grande sin duda de cuantas hizo Carlos..., y tan valioso fue el botнn que se hizo en las batallas, que bien puede decirse, que los francos arrebataron legнtimamente a los hunos lo que йstos habнan arrebatado antes ilegнtimamente a otros pueblos... Su ъltima campaсa la emprendiу Carlos contra los germбnicos del norte; se les llama tambiйn daneses... piratas del mar en sus orнgenes. Estas fueron, pues, las guerras, que hizo el poderoso rey Carlos..., planificу con gran prudencia y llevу a cabo con gran йxito. Agrandу el reino franco, que ya habнa recibido grande y fuerte de su padre Pipino, ampliбndolo casi el doble... Carlos... se demostrу con ello... como un gran gobernante, habiйndose ocupado largamente en tales planes. »
EiNHARD2
«. Su objetivo fue el de ganar el mundo para Dios y para Cristo en la medida en que le fue posible, aprovechando el нmpetu germбnico. »
SCHOFFEL, JESUНTA3
1. LA «MISIУN» SANGRIENTA DE LOS SAJONES
(772-804)
Los sajones, cuyo nombre (sin duda una forma abreviada de Sahs-nуtas) significa compaсeros o gentes de la espada, aparecen mencionados por vez primera en los escritos del matemбtico, astrуnomo y geуgrafo Claudio Ptolomeo, que viviу en el siglo n. Su valentнa la temieron ya los romanos, y Tбcito exaltу su sentido de la justicia. «Sin avaricia y sin desmesura, tranquilos y aislados, no provocan ninguna guerra, ni causan devastaciones con campaсas de saqueo y botнn. » Sus incursiones armadas las realizaban por mar y por tierra: las primeras en troncos de бrboles ahuecados, en los que cabнan alrededor de tres docenas de hombres.
Llegando tal vez de Escandinavia, prefirieron asentarse en zonas costeras. Durante largo tiempo se quedaron en la zona septentrional francesa, que se llamу sinus saxonicus (golfo sajуn), y en Flandes, ocupando tambiйn los territorios de Lьneburg tras la retirada de los longobardos. A mediados del siglo v una buena parte pasу a Inglaterra, pero la mayorнa continuу asentada en el continente, donde su reino se extendiу por todo lo que hoy es la Alemania noroccidental, exceptuados los territorios frisones. 4
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De todas las comarcas alemanas ъnicamente las sajonas, de las que conocemos mбs de un centenar por sus nombres, continuaron siempre en las mismas manos. Menos expuestas a las influencias romanas, tambiйn conservaron su identidad nacional mejor que los pueblos que vivнan mбs al sur. Y aquellos sajones paganos tuvieron «las mejores leyes», segъn reconoce hasta el abad de Fulda, Rodolfo. «Y se esfuerzan por muchas cosas de provecho y de conformidad con la ley natural persiguen cosas honrosas con honestidad de costumbres. »5
Su nombre no comprende una tribu ъnica, sino mбs bien una asociaciуn de tribus (sobre lo que discuten los investigadores), a cuya formaciуn contribuyeron, ademбs de los sajones, los chaucos, los angrivarios, los cheruscos, los longobardos, los turingios y los semnones. Mбs tarde se incorporaron tambiйn los engerios, los westfalios y ostrofalios asн como los sajones del Elba. Los francos, empero, los consideraron como miembros de un solo pueblo y por lo general les llamaron «saxones» sin mбs distinciуn. Tras su conquista de Turingia, emprendida al alimуn con los francos, el 531, se quedaron con la parte oriental, que aъn lleva su nombre.
Es probable que en sus orнgenes tambiйn los sajones tuviesen reyezuelos; pero entre ellos no se desarrollу un reino o un ducado propiamente dicho. Su sociedad la formaban cuatro clases: nobles (nobiles), libres (liberн), latos (liti) y esclavos (servi), siendo ya los «latos» los ligados al suelo, los siervos de la gleba. Las clases inferiores se defendieron contra la cristianizaciуn y dominio de los francos, en tanto que la nobleza procurу salvaguardar sus intereses apoyбndose en el enemigo del Estado. 6
Tambiйn en otros lugares fue la clase acaudalada la que primero se pasу al cristianismo. Mientras que, por ejemplo, la nobleza de Civitas Treverorum, del obispado de Trйveris, se convirtiу a finales del siglo iv, los arrendatarios, los siervos y los braceros se mantuvieron por mбs tiempo y con mayor obstinaciуn en las viejas creencias «convirtiйndose» sуlo mediado el siglo v. Algo parecido ocurriу en la regiуn de Trento, donde los coloni vivнan como gentiles, cuando ya los seсores terratenientes se habнan hecho cristianos. Y tambiйn entre los eslavos sus prнncipes precedieron probablemente a sus tribus en el bautismo. «Asн discurrieron las cosas en todas partes con la labor misional dirigida oficialmente, no constituyendo nada especial el que la misiуn franca se desarrollase " de arriba abajo". Una construcciуn " democrбtica", que hubiese empezado desde abajo, por los estratos populares socialmente insignificantes, habrнa sido imposible, pues hubiera aparecido sin mбs como una demagogia y la nobleza la habrнa rechazado» (Flaskamp). Difнcilmente puede considerarse casual el que en el cambio completo de la situaciуn durante los primeros siglos cristianos por doquier fuese la clase dominante la que se prometiу las mayores ventajas de la religiуn del amor. 7
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