¡Los 10 Mandamientos fueron dados para el beneficio de los seres humanos!

Faith in Jesus can definitely lead a man towards sincere repentance and good deeds; whereby the latter can obtain everlasting life. But the believer ought to be truthful to God’s word [as revealed in His Holy Law] avoiding self deception, as well as theological “cherry picking” and intellectual “hair splitting”. Why? Because it is this commitment with truth and honesty what will make him a true Israelite. As it is also taught in the gospel: «Then Jesus saw Nathanael coming toward him and said about him, “Here truly is an Israelite in whom there is no deceit”»- John 1: 47

“ Science cannot solve the ultimate mystery of Nature. And that is because, in the last analysis, we ourselves are a part of the mystery that we are trying to solve (sort of like an eyeball that wishes to see directly into all things, not realizing it will never be able to directly see into itself)” ― Max Planck

In no case can we ever rest assured that what is absolute in Science today will remain absolute for all time. We see in all modern scientific advances that the solution of one problem only unveils the mystery of another. Each hilltop that we reach discloses to us another hilltop beyond. We must accept this as a hard-and-fast irrefutable fact… The aim of science… is an incessant struggle towards a goal which can never be reached. Because the goal is of its very nature unattainable. It is something that is essentially metaphysical and as such is always again and again beyond each achievement.

“ La nació n que condona al abierto adulterio, esta destinada a convertirse en una sociedad de bastardos”
La Ley de Dios condena al hombre que expone [abiertamente] su pecado ante dos o mas testigos (es decir, a quien peca pú blicamente). Como esta escrito: “Por dicho de dos o de tres testigos morirá el que hubiere de morir; no morirá por el dicho de un solo testigo… Y el hombre que adulterare con la mujer de otro, el que cometiere adulterio [pú blicamente] con la mujer de su pró jimo, indefectiblemente se hará morir al adú ltero y a la adú ltera”- Deuteronomio 17: 6 & Levitico 20: 10. Es que, la nació n que condona al abierto adulterio, esta destinada a convertirse en una sociedad de bastardos.

¡ Los 10 Mandamientos fueron dados para el beneficio de los seres humanos!

Cuando los Reyes de las Naciones del Mundo, oyeron el Primer Mandamiento de י ה ו ה (“Yo soy el Señ or tu Dios... ”), no fueron muy impresionados, pues arguyeron diciendo: “¿ Qué soberano desea ser negado? Al igual que cualquier otro rey, י ה ו ה ordena que se le reconozca”. Luego, cuando escucharon acerca del Segundo Mandamiento (“No tendrá s dioses fuera de mi... ”), similarmente observaron: “¿ Existe algú n soberano que tolere alguna otra autoridad? Al igual que todos los reyes, י ה ו ה quiere que se le adore a É l solamente. ¡ Ese es el por qué decretó que nadie sirviese a otros dioses! ”. Tampoco se conmovieron los Reyes de la Tierra, cuando escucharon el tercer Mandamiento (“No tomaras en vano el nombre de tu Dios”, pues comentaron diciendo: “¿ Qué rey querrí a que sus sú bditos juraran falsamente en su nombre? י ה ו ה tampoco lo quiere”. Luego, cuando escucharon acerca del Shabbat (“Seis dí as trabajaras, mas en el sé ptimo dí a, descansaras... ”), dijeron: “¡ Desde luego! Todos los reyes gustan que su dí a especial sea celebrado... ”
Pero, cuando escucharon acerca de la mitzvá (mandamiento) acerca de honrar a los padres (“Honra a tu padre y a tu madre... ”), todos los reyes se levantaron de sus tronos, y alabaron a י ה ו ה, admitiendo: “Si alguien en nuestros cí rculos es elevado a un noble rango, inmediatamente niega a sus [plebeyos] padres; pero י ה ו ה es mucho mas noble, y actú a de un modo distinto, ¡ El ordenó que todos honren a sus padres! ”.
Así, los reyes de la Tierra “admitieron” (que estaban equivocados), y entendieron retro-activamente que, los mandamientos de י ה ו ה no fueron dadas [como originalmente imaginaron] con el fin de honrar a י ה ו ה. ¡ Los mandamientos fueron dadas para el beneficio de todos los seres humanos! Con respecto a esta “admisió n” de los reyes de la tierra, la antigua traducció n Hebrea del Salmo 138: 4 dice de la siguiente manera: “Todos los Reyes de la Tierra, oh Señ or, admitieron (que estaban equivocados), despué s que oyeron las palabras (entié ndase, los mandamientos) de tu boca”.