Carlos Martell «.. con mucho derramamiento de sangre» y «con la ayuda de Dios»

Drogo, el hijo mayor de Pipino, muriу ya en el 708 vнctima de una fiebre. Y el hijo menor, Grimoaldo (II), mayordomo en Neustria y verdadero sucesor de Pipino, cuando se dirigнa a visitar a su padre gravemente enfermo en el palacio de Jupille de Lьttich, en abril del 714 y en la basнlica luttense del mбrtir Lamberto fue abatido por el frisen Rant-gar. Y como el propio mayordomo Pipino mona a los pocos meses, el 16 de diciembre del 714, la hegemonнa de los carolingios en el reino franco peligraba ciertamente.

Poco antes de su muerte Pipino habнa destinado a mayordomo a Teu-doaldo, retoсo extramatrimonial de Grimoaldo, que entonces tenнa seis aсos; pero habнa excluido de la sucesiуn a su propio hijo de unos trece aсos (nacido de su concubinato con la bella Chalpaida), Carlos, conocido por el sobrenombre de «el Martillo» (Tudes, Tudites, Martellus), que sуlo aparece ya en el siglo ix y que simboliza la destrucciуn de sus enemigos. Plektrud, viuda de Pipino, que gobernaba como tutora bajo el reinado nominal de Dagoberto III, encarcelу en Colonia a su yerno Carlos Martell. Pero «con la ayuda de Dios» йste huyу en el verano del 715 y combatiу contra sus antagonistas neustrios, el mayordomo Raganfred y el rey Chilperico II (716-721), quien de clйrigo se llamу Daniel. Por supuesto se trataba de dos catуlicos, que poco antes habнan pactado una alianza con los frisones y sajones paganos y habнan avanzado victoriosos sobre Colonia, residencia de la viuda Plektrud, «y juntos devastaron aquellos territorios» (Fredegarii Continuationes). ²⁵

Pero entonces se puso en marcha Carlos «y hubo un gran derramamiento de sangre por ambas partes», como anota el mismo cronista. Carlos batiу a los neustrios el 716 en las Ardenas, al sur de Lьttich, y en el 717 en Vinchy, al sur de Cambray. Persiguiу a los fugitivos hasta Parнs, regresу cargado de un botнn abundante y obligу a Plektrud a que le entregase Colonia a la vez que su tesoro regio. Asн empezу a hacerse con el tesoro de Austrasia, aunque con Clotario IV (717-719) dio al paнs un rey -aunque dependiendo por completo de йl-, que en la prбctica fue un rey antagonista del neustrio Chilperico.

El aсo 718 Carlos Martell asolу Sajonia hasta el Weser y ese mismo aсo o el siguiente derrotу en Soissons a un destacamento neustrio -aquitбnico a las уrdenes del mayordomo Raganfred y del duque Eudo. Mas pronto llevу a cabo nuevas campaсas contra los sajones combatiйndolos hasta el 738, y ya entonces pudo imponer la obligaciуn de un tributo y la entrega de rehenes a «aquellos paganos incorregibles». Literalmente йstas son las palabras de nuestra fuente: «... el valeroso Carlos irrumpiу con el ejйrcito franco, acampу de acuerdo con un plan inteligente allн donde desemboca el Lippe, junto a la corriente del Rin, devastу la mayor parte de aquella franja de terreno con abundante derramamiento de sangre, hizo tributaria a parte de aquel pueblo salvaje, tomу muchos rehenes del mismo y con la ayuda de Dios regresу victorioso a casa».

Entretanto todavнa marchу otras dos veces contra Baviera: primero el 730 contra los suabios, que definitivamente fueron sometidos; y al aсo siguiente llevу a cabo dos guerras contra Aquitania, que incendiу en buena parte.

Tras largas luchas y graves reveses Carlos obtuvo el reconocimiento de mayordomo de todo el reino franco. A la muerte de Clotario IV, el 719, el duque Eudo, al que de nuevo tolerу, le entregу al efнmero y umbrбtil rey Chilperico II junto con el tesoro regio, y lo reconociу como rex de Neustria. Chilperico viviу un aсo mбs. Despuйs puso sobre el trono al rey Teuderico IV (720-737), del que no habla ninguna fuente, ni siquiera de su muerte, que conocemos de casualidad. Y desde el 737 gobernу personalmente Carlos sin la mediaciуn de ningъn merovingio y como autйntico fundador del reino carolingio.

Carlos Martell habнa afianzado su poder mediante incursiones continuadas. Aсo tras aсo marchaba de campaсa, no sуlo para asegurar sus fronteras sino tambiйn para ampliarlas sometiendo y esclavizando gentes. No avanzу ъnicamente contra los neustrios; combatiу tambiйn por doquier contra los alamanes, sobre los que obtuvo en el 725 y en el 730 victorias enormemente sangrientas, a la vez que hacнa que el obispo Pirmin misionase a favor de su propia hegemonнa. Llevу a cabo varias guerras contra «la salvaje naciуn marнtima de los frisones» («una de las realizaciones principales de su vida»: Braunfeis), y dos campaсas, el 733 y el 737, acabando incluso con una «audaz excursiуn marнtima» y «con el adecuado nъmero de naves» avanzу con su flota por el Zuider-zee; devastу por completo el paнs, matу al duque, el «taimado consejero» de los frisones, destruyendo y quemando los santuarios paganos... con el buen arte cristiano de difundir la buena nueva del evangelio y, de paso, tambiйn un poco el propio poder. Combatiу a los sajones, a quienes enviу a Bonifacio con una carta de recomendaciуn. Marchу contra los turingios y los bбvaros, sobre Burgundia y sobre Provenza y arremetiу contra la «gens pйrfida» de los sarracenos, de los бrabes en el 732. ²⁶